Mensajes de diversas orígenes

 

jueves, 16 de enero de 2025

Sólo en la Divina Voluntad, a través del Corazón Inmaculado de María, podré multiplicar vuestras ofrendas hasta el infinito y derramar gracias para tocar los corazones

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo al Niño de la Divina Voluntad en Francia el 9 de enero de 2025

 

Jesús: Mi hijito de la Divina Voluntad, veo tu cansancio y tu corazón desgarrado por las almas que percibes sin rumbo, errantes, perdidas, mientras que Yo estoy allí para ellas, soportando con Amor el peso de sus pecados pasados, presentes y futuros. Tu corazón llora y te preguntas cómo no se sienten tocadas por Mi Amor.

Cómo prefieren una vida sin sentido, hecha de placeres instantáneos, que se pierden en la nada de su yo, encerrándolos en una burbuja de orgullo. Tú Me ofreces tu vida para que ellos puedan ser tocados a cambio.

Hijo Mío: para muchos, cuanto más les doy, más se cierran al Amor. Este tiempo es peor que el tiempo del Diluvio, porque aquí lo tenéis todo para venir a Mí, pero estáis atrapados en múltiples ataduras demoníacas, ya no os dais cuenta de que ya estáis en los flujos de lava, como ascuas de blasfemia.

Es en la Voluntad Divina donde podéis llevar y reparar en el lugar de todos estos hijos atrapados en pecados. Sólo en la Divina Voluntad, a través del Corazón Inmaculado de María, podré multiplicar vuestras ofrendas hasta el infinito y derramar gracias para tocar los corazones.

Mi Madre reúne a este ejército de oraciones de todo el mundo, porque sólo así llegará Mi Reino. ¡Reza y actúa! ¡No encuentres ninguna excusa para retirarte de la oración y de los Sacramentos!

Perdéis mucho tiempo en trivialidades. Sin embargo, tendréis cuentas pendientes. Y en primer lugar, la vuestra, cuando Me veáis, cuando veáis el Amor y que nada os impida veros a vosotros mismos a la luz de Mi Amor. Entonces vosotros mismos lloraréis por lo que podríais haber hecho, por las misiones que Yo había previsto para vosotros desde toda la eternidad.

Hijitos, venid a Mí, participad en este combate espiritual en el que Mi Madre y Yo estamos aquí con Nuestro Amor. Dejad de haceros daño intentando gestionar y dirigir todas las cosas. Entregaos a Mi Amor. Dejad que Mi Madre os guíe hacia Mí.

Seguid el camino de la oración y de los Sacramentos.

La gran batalla ha comenzado. Sabéis que es sobre todo espiritual. Pero se incorporará cada vez más a vuestro mundo mediante signos poderosos que no vienen de Mí. Ahora es el momento de ser fuertes. Un mundo demasiado racionalista y modernista sólo puede caer y derrumbarse en las ilusiones que le conducirán al infierno y al castigo del fuego. Porque negar la vida y a Aquel que es el Creador de la vida conduce al hombre a la autodestrucción. Él, el hombre, ha suprimido el Amor en busca de satisfacción y diversión. En sus excesos, se destruye y se suprime a sí mismo. En esta locura, se volverá airadamente contra ti, porque no puede soportar tu alegría. Yo estaré contigo hasta el final, porque la sangre de los mártires convertirá a multitudes enteras.

Sabéis que el tiempo se acaba y que las ilusiones que Satanás ha lanzado a través de la masonería desaparecerán. Difundid las Medallas Milagrosas de porque sanarán muchos corazones.

Preparaos también para transmitir las palabras que dirijo al rey Felipe de Bélgica, para que lleguéis a él y le despertéis a la tarea que debe cumplir por Bélgica.

Rezad por Francia, porque el caos caerá sobre esta amada nación. Francia, ¿cuándo te decidirás a luchar por tu fe? Salid y colocad las banderas de Nuestros Dos Corazones Unidos en vuestras ventanas. ¿Estás dispuesto a servirme o prefieres permanecer tibio? No puedes servir a Dios y al diablo al mismo tiempo.

Dejad vuestras costumbres, porque pronto vuestro estado será tan turbulento que todo se derrumbará de repente. Y a pesar de ello, muchos preferirán las noticias ilusorias y mortales de sus pantallas, que se las tragarán para toda la eternidad.

¡Uníos, rezad y ayudaos! Daos prisa y avanzad conmigo y con Mi madre en este espíritu de reconquista. Haz que los jóvenes vuelvan a rezar contigo. Dales tiempo y espacio para rezar contigo, por su misión, su futuro, su vocación y su conversión.

¡Reza por Mis sacerdotes!

¡Mantén la esperanza a pesar de este acontecimiento que afectará a muchos de Mis hijos!

¡Rezad, rezad, rezad! Siempre podéis atenuar el impacto.

Volveré con un mensaje de consuelo después de este acontecimiento. No tendréis que esperar mucho. Sigue adelante con fe. ¡Te bendigo! ¡El tiempo es muy corto!

El cese de Mis mensajes, tanto aquí como en otros lugares del mundo, está cerca, hijita de la Divina Voluntad.

¡Por tus rosarios! Te amo infinitamente. Mirad, Mi corazón está abierto para vosotros, ¡sumergíos en Mi Misericordia!

Origen: ➥ t.Me/NoticiasEProfeciasCatolicas

El texto de este sitio web se ha traducido automáticamente. Por favor, disculpa cualquier error y consulta la traducción al inglés.